viernes, 6 de marzo de 2015

Capítulo 86


- ¡Mikey!- lo llama Avril cuando ve al bajista entrando al hospital- ¿Viste a las chicas? Avie quiere hablar con ellas.
- Si no me equivoco, deben estar en el patio de adelante charlando- y al ver que la rubia no llevaba abrigo alguno, agregó- ¿Querés que las vaya a buscar?
- No, gracias, voy yo- y salió casi corriendo fuera a buscar a Hil y a Alice.

Las dos amigas estaban a punto de entrar cuando casi chocan con Avril quien estaba abriendo la puerta.
- ¡Avril! ¿Está todo bien?- pregunta Al a ver que la canadiense estaba un poco agitada.
- Sí, sí, perfecto- hizo una pausa para tomar aire y continuar-. Avril quiere verlas a las dos.
- Ah, ¿así que ahora la dejás que nos vea?- pregunta con malicia Hil mientras pasa a su lado, ignorando la mirada cargada de reproche de Alice.
- En realidad, yo le dije que tenía que verlas a ustedes- aventuró a decir Avril, haciéndole frente a Hil.
Antes de que la aludida pudiera abrir la boca para decir algo más, Al se interpuso entre las dos chicas, y tomó de un brazo a su amiga para que continuara caminando por el vestíbulo hasta la habitación de Avie.
- Algún día se las va a ver conmigo esa petiza…- sentenció Hil una vez que estuvieron fuera del alcance de vista de la cantante.
- No empieces, Hilary- la reta Al antes de entrar al cuarto donde estaba Avie-. Y no le vengas con más problemas entre vos y Avril- dice señalando la puerta-. El doctor dijo que no podía estresarse mucho.
Ambas entran a la habitación que estaba en completa oscuridad. Un poco extrañada, Al prende, lo que hace que Avie suelte un gemido y se tape los ojos con la mano sana. Las chicas observan que ya le habían sacado muchos de los cables que antes tenía, y que habían menos máquinas a su alrededor, hechos que las aliviaron bastante.
- ¿Te volvieron vampiro que te molesta la luz ahora?- bromea Hil sentándose en la silla junto a la cama de su amiga.
Avie se incorpora y trata de acomodarse un poco el pelo.
- No, tonta- le responde riendo- Perdón que las hiciera irse antes… Quería ver cómo estaba Avril- se disculpa mirando a sus amigas.
- No tenés porqué disculparte- responde Alice antes de que Hilary tuviera tiempo de abrir su sarcástica boca-. Es entendible- y le sonríe.
- Sí, eso…- acota Hil, mordiéndose la lengua para no decir nada más.
- ¿Cómo están ustedes?- pregunta Avie con la voz ronca aún. Hacía muchos días que no hablaba, y tenía que hacer entrar en calor sus cuerdas vocales.
- Mejor que vos, seguro- le dice Hil arqueando una ceja al ver su brazo encellado.
- Bueno, no sé si tan así…- dice Al por lo bajo, mirando con perspicacia a Hilary.
- ¿De qué me tengo que enterar?- pregunta Avie abriendo grandes los ojos.
Hil le dedica una mirada asesina a su amiga que la había delatado. No le quedaba más remedio que contarle todo lo que le estaba pasando con Frank y con Jared, y que ahora estaba en una encrucijada porque no sabía adónde ir ni con quién.
Así pasaron dos horas o más, hablando sin parar de todas las cosas que Avie se había perdido mientras no estaba. Era reconfortante estar otra vez las tres juntas y poder charlar tranquilas, sin que los músicos que les habían sacado suspiros cuando eran adolescentes las interrumpieran ahora. Después de tanto revuelo, necesitaban volver un rato a la realidad de sus vidas, recordar viejos tiempos y planificar qué era lo que iba a pasar en un futuro no tan lejano como parecía.

Frank y Mikey estaban sentados en un banco fuera del hospital fumando un cigarro, pensando cada uno en sus problemas en silencio. Mikey recordando lo que había pasado con Alice, y pensando cómo podía ayudar a su hermano a reconquistarla. Sabía que Gerard podía ser un idiota cuando quería, pero se notaba, o al menos él notaba, que de verdad estaba interesado en la chica. Frank se devanaba los sesos pensando en cómo hacer para que Hilary se fuera con él a Barcelona, donde el resto de la banda lo esperaba.
- ¿Qué te pasa, enano?- le preguntó Mikey a Frank, dándole un codazo amistoso.
- Nada, ¿a vos?- le pregunta devolviéndole con más fuerza el golpe.
- Pensando en cómo ser buen hermano y ayudarlo a Gee con su conquista- responde, y suelta un suspiro largo. No habían pasado muchos días desde que habían llegado al hospital, pero el cansancio estaba comenzando a hacerse notar.
- No te preocupes por eso- le da la última pitada al cigarro y lo tira a un costado-. Dejalo a tu hermano que se haga cargo solo de sus problemas y calenturas.
- Pienso que esta vez va a necesitar más que unas miraditas lindas… Al cambió mucho este tiempo, y creo que lo de Brendon va enserio- y frunce el ceño. Aún no estaba seguro de qué impresión le causaba ese chico.
- Como sea, no es tu problema, así que te sugiero que no te metas en ese lío- y lo mira a los ojos, como para corroborar que el bajista hubiese entendido lo que le estaba diciendo.
Mike baja la cabeza y ríe. ¿Acaso había algún momento en donde Frank no tuviera razón? Podría ser unos años menor que él, pero claramente había vivido muchas más cosas, o al menos tenía un mayor conocimiento sobre las relaciones.
- Tenés toda la razón del mundo. Ahora, ¿podrías decirme qué te pasa?
Frank se toma la cabeza entre las manos y suelta un largo suspiro. Antes de explicarle sus problemas, llena sus pulmones con ese aire helado típico del invierno. Era como si un montón de pequeñas agujas de hielo se clavaran dentro de él y luego se derritieran.
- Hilary me va a volver loco, eso pasa- Mikey se tiró hacia atrás, sorprendido por ver al guitarrista tan complicado por una chica que no fuera su ex esposa-. Y no sé si está bien. Digo, nos llevamos muchos años, yo vivo de la música y a la larga todas quieren lo mismo: una casa, un marido que se quede en esa casa, hijos… No digo que me arrepienta de haber tenido a mis hijos, pero es complicado. Siento que todavía soy muy pendejo para esas cosas, pero muy viejo para estar con Hil.
- No había pensado en eso…- ¿por qué hasta entonces no se había fijado en cuan jóvenes eran esas chicas?- Pero no creo que eso vaya a ser un problema… Lo de la edad, digo.
- Seguramente no. Ellas quieren estar con nosotros, está claro…
Antes de que Frank pudiera seguir contando lo que le pasaba, sale Jay del hospital, y camina tranquilamente hacia los dos músicos, hasta quedar frente a ellos. Había una diferencia abismal entre los estilos de cada banda, diferencia que se notaba inclusive en la forma de vestir de cada uno.
- ¿Quemando sus pulmones un rato?- pregunta sarcástico al ver las colillas de cigarros desperdigadas en el suelo.
- No es de tu incumbencia, Leto- le espeta molesto Frank- ¿Hay algo en lo que te podamos ayudar?
Jared entrecierra los ojos y se rasca la cabeza, haciéndose el pensativo unos segundos. Luego le dedica al guitarrista una sonrisa perfecta.
- Sí, sí hay algo, Iero- se cruza de brazos y lo mira fijo a los ojos-. Quiero que Hil venga conmigo.
Frank comienza a reír a carcajadas. Tanto Jared como Mikey se lo quedan mirando extrañados ante esa reacción. Cuando para, se pone de pie delante del cantante  (quien fácilmente era más alto que el por una cabeza) y lo mira amenazadoramente.
- Ya te dije que Hilary va a elegir solita a donde ir. Si se quiere volver conmigo, dejala en paz y seguí con tu vida, Jared.
- No te preocupes, me voy a encargar de que eso no suceda- y dando media vuelta se aleja de ellos.

Una vez dentro del hospital, Jared se encierra en uno de los baños para hombres, toma su teléfono y marca el número de su hermano mayor.
- ¡Jay!- lo saluda con entusiasmo Shannon- ¿Está todo bien?
- Casi- le responde, mordiéndose el labio inferior mientras pensaba en cómo contarle lo que le estaba pasando con Hil-. Hay algo… Mejor dicho alguien que me tiene un poco complicado.
- ¿Quién? ¿Algún paparazzi molesto?- pregunta con un deje de indiferencia. Ya sabía, o al menos sospechaba, qué era lo que le iba a decir.
- Es Hilary. A más tardar mañana vamos a estar saliendo todos de este hospital, y ella tiene la posibilidad de irse tanto con Frank Iero como conmigo- suelta un largo suspiro-. Y tengo miedo que elija al enano.
- ¿Por qué decís esas cosas? Digo, mientras estaba de novia conmigo me engañó con vos…- le soltó, casi como un reproche.
- Tengo el presentimiento de que algo pasó entre ella y Frank, por eso lo digo- le contestó tajante para no darle lugar a protestas sobre hechos pasados.
- Si estás tan seguro de eso, bro, sólo hay una cosa que podés hacer- Otra vez aconsejando a mi hermanito menor… Y para que se quede con una de mis ex, pensaba Shannon.
- ¿Qué cosa?- pregunta intrigado Jay.
- Fácil: hacé que eso que haya pasado con Iero no sea nada comparado con lo que le vas a hacer vos.